jueves, 14 de mayo de 2015

CARNAVAL CANNABICO COLOMBIANO 2015

CARNAVAL CANNÁBICO BOGOTANO 2015

"Todo lo que digan que somos, eso somos.
Y estamos muy orgullosos de nosotros mismos".
We can be together. Jefferson Airplane



Durante el transcurso del último año se ha hecho evidente el incremento de usuarios de Marihuana en la capital del país. Los parques, las esquinas, los puentes, paraderos y la casi totalidad de los ámbitos abiertos se han ido convirtiendo en escenarios cotidianos del ejercicio libertario de trabarse. Esa realidad, pese a su contundencia, continúa siendo desconocida por dos actores determinantes del atraso de los procesos históricos: la institucionalidad oficial y la hipocresía social.


Lo cierto es que la resistencia ejercida por los Colinos en todas las localidades de la metrópoli ha logrado demostrar que las estrategias propuestas tanto desde la presidencia de la República, como desde la Alcaldía Mayor, se basan en el miedo y la demagogia. Es decir, por una parte dicen reconocer que la guerra contra las drogas ha fracasado pero, por otro lado, limitan su propuesta a ofrecer tratamientos para adictos enfermos y a enviar camiones de policías a recoger, con garrote y fierro en la mano, a personas que no están perturbando en lo más mínimo la tranquilidad de ningún vecindario. Mientras tanto, una confluencia desesperada de psiquiatras, curas de todas las creencias, políticos, padres de familia y educadores de auditorio justifican esa represión, tan pobremente argumentada, en la excusa que es urgente que alguien haga algo.


Sin embargo, también se hacen cada día más visibles un sinnúmero de acciones colectivas, parches, grupos de investigación, y circuitos de producción, intercambio, usos y consumos de la planta para todos sus fines. Hoy, puede demostrarse que los aportes más audaces en la discusión sobre el tema han emergido del encuentro creativo de los propios marihuaneros; frente a las falencias conceptuales del Estado que originan costosas políticas inocuas.


En el caso de Bogotá, por parte de la institucionalidad no solo se carece de visiones y respuestas adecuadas para encarar el fenómeno de producción, distribución y consumo de plantas prohibidas y sustancias derivadas, sino que, además, la irresponsabilidad de funcionarios encargados de abordar dichas problemáticas a nivel distrital ha derivado en una cadena peligrosa de señalamientos, amenazas y vetos contra sectores cannábicos que no quieren ser contabilizados como seguidores de ningún gobernante, y que han reclamado de forma organizada contra los abusos de autoridad cometidos en el tratamiento diario dado a los consumidores. Por ejemplo, las iniciativas de convivencia formuladas ante las instancias oficiales, y la presencia denunciada de grupos encapuchados y armados en la Universidad Nacional y en la Universidad Distrital amenazando de muerte a los Colinos, han sido objeto del más grosero desprecio institucional.


Toda vez, que en los años 2013 y 2014 se han formalizado las solicitudes para realizar las actividades del CARNAVAL CANNÁBICO COLOMBIANO en Bogotá, y solo se ha obtenido como respuesta gubernamental el desentendimiento y el bloqueo de los burócratas, combinados con la hostilidad de la autoridad uniformada; en esta ocasión hacemos pública la comunicación dirigida a la Secretaría de Gobierno.


Por lo anterior, los organizadores de la versión año 2015, coincidimos en reivindicar los siguientes objetivos:


- EL CIERRE DEFINITIVO DE LA UPJ PARA LOS COLINOS.

- IMPUGNAR EL ACUERDO SOBRE DROGAS PACTADO EN LA HABANA, ENTRE EL GOBIERNO NACIONAL Y LAS FARC.

- EXIGIR EL CESE DE LAS AMENAZAS CONTRA ACTIVISTAS Y COLECTIVOS CANNÁBICOS EN COLOMBIA.

- LIBERAR LA PLANTA PARA TODOS SUS USOS.

- ADECUACIÓN DE SITIOS EN ESPACIOS PÚBLICOS (INCLUIDAS LAS UNIVERSIDADES), PARA EL USO LIBRE DE LA MARIHUANA.

-EN SOLIDARIDAD CON EL CAMPAMENTO DE LOS COLINOS QUE HAN DEFENDIDO EL HUMEDAL LA CONEJERA.


-BOGOTÁ, 2 Y 3 DE MAYO-


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