domingo, 5 de julio de 2020

BREVE HISTORIA DEL MOVIMIENTO CANNABICO COLOMBIANO PARTE II

BREVE HISTORIA DEL MOVIMIENTO CANNABICO COLOMBIANO (PARTE II)
Del fracaso del movimiento cannabico al tercer ciclo de protesta Antiprohibicionista

En el año 2015 la revista alternativa y cultural Salmón Urbano de los compañeros Lennon y Boris de la UT de Ibagué, publicaron la primer parte de esta versión histórica del Movimiento Antiprohibicionista de las drogas, el cual en Colombia y para este estudio,  se absorbe y reduce en lo llamado Movimiento Cannabico Colombiano[1]. En ese entonces se da un brochazo al origen del movimiento y se constata que desde el 2004 hay actividad antiprohibicionista-cannabica en Colombia. A la vez, se develan algunos grandes errores o lecciones aprendidas del movimiento; pues se denunciaba el eguito de Don Marcha, el carrusel de contrataciones del Asistencialismo Tecnocrático Seudosocial (ATS) y la Bogotá Humana de Petro y se venía el fracaso de lo pactado en La Habana en materia de drogas, el mal manejo de la Candidaturra Cannabica al Senado de la república, la Legalización del Cannabis medicinal y sus expo-cannabusiness y peor aún, la construcción del ser cannabico instrumentalizado… los ACTIVISTAS CANNABASTARDOS.

El fracaso del Movimiento Cannabico Colombiano (MCC) radica en varios aspectos que durante el 2015 hasta la actualidad afloran y destruyen una acción colectiva que en año 2017 tuvo su cenit, pues se genera la primera asamblea nacional constituyente del MCC en marzo, y en mayo se da la primera audiencia pública en el Congreso de la República a los usuarios activistas de SPA. No podía ser mejor. Pero ¿Qué paso con todo lo lindo y bello? ¿Por qué los Cannábicos no fuimos a La Habana y que pasó con las 24 propuestas presentadas en el 2013 al Estado y las FARC? ¿Se robaron los voticos de la candidaturra y no invitaron a la rumba? ¿Por qué la legalización del cannabis en Colombia es un Cannabusiness? y ¿Cómo el activista comercial se consolida como el cannabastardo local? Y en últimas o de primeras. ¿Por qué, si en la asamblea constituyente del MCC éramos 105 personas, hoy por hoy, solo CUATRO (4) payasos están manejando el mambo?

Cuando se había superado el eguito paisa de la CCC y se denunciaba el carrusel de contrataciones psicoactivas entre ATS y la Bogotá Humana; en Bogotá, desde el 2012 se vivieron las épocas más agitadas del activismo antiprohibicionista Distrital. Marchas con tomas del Parque Nacional hasta Los Periodistas, fumatones, entradas al congreso y al palacio de Lievano, eventos en el HUITACA y el Salón Boyacá del Capitolio Nacional, Comisión Primera del Senado, UTL de Senadores, la gran marcha de toma Kolina de la Plaza de Bolívar del 2017, RCN y 200 horas fumando Marihuana, la W, Noticias UNO, Caracol y hasta el New York Times. Si a la Dosis; porque No Pagamos, Lo Pegamos. La fotografía anterior es insuperable y sigue activa (afortunadamente). Sin embargo, el nivel de incidencia del Movimiento Cannabico Distrital era inversamente proporcional al despropósito y decadencia del activista cannabico nacional. Desde el 2015, paralelo al anterior escenario paradisiaco, un ambiente de calumnias, injurias, amenazas, muerte, parafernalia, y cannabusiness dominó buena parte del escenario “cannabico”. El descontrol no pudo ser peor, sin embargo hoy se avizora el tercer ciclo de protesta Antiprohibicionista y viene sugerente.


En el año 2013 se entrega al Estado Colombiano y a las FARC-EP, 24 propuestas construidas en colectivo por más de 24 activistas en evento magno centro de convenciones G12. Cuatro meses después, se da un encuentro entre activistas e indígenas campesinos cultivadores de ilícitos de todo el país en la Plaza de los Artesanos en Bogotá, en este evento se delega en comisión al señor Eduardo Veléz como vocero del MCC para representar al Carnaval Cannabico Colombiano en La Habana, Cuba. El viajecito nunca se dio, por el contrario, el delegado o vocero para representar al parche es amenazado de muerte en redes sociales oficiales del Movimiento Bolivariano durante una parada militar en la Universidad Distrital de Bogotá.

En dicho comunicado que aún es público, el frente 52 y 53 de las FACR dan ultimátum de muerte y acusan de paraco y jibaro al personaje[2]. Ese mismo día en el palacio de Lievano, luego de estar generando una cercanía con la Bogotá Humana de Petro, José Cuesta, secretario de gobierno del entonces dice de manera ingenua: “Muchachos a Petro le dicen al oído que ustedes hacen marchas porque están relacionados con jibaros y así”. Inmediatamente de forma decorosa el cucho se para y le dice en la cara al burócrata en cuestión: “José Cuesta, hasta este momento llega nuestra amistad de 34 años”, y sale del recinto…Échele Cabeza que Petro nos dio en la Cabeza…Asistencialistas Tecnocraticos Seudosociales… ¡hijos de mil putas! El proceso de denuncia de estas amenazas espera aún respuesta en Fiscalia, Procuraduria y todas las CIAS. Los contraticos; bien su merced, andan vendiendo humo y muebles al senador Gustavo Bolivar y demás que volverán al gobierno distrital. Gracias.

En el 2014 se genera la Candidaturra Cannabica al Senado de la Republica (72 Verde). Se debe declarar que el ejercicio fue inmaduro, desprevenido y a la ligera, y tiene que ver con parte de la instrumentalización política del Movimiento y la falta de capacidad de respuesta para los desafíos sociales que, en materia política, exige la vida social a un sin número de individuos. Luego de esperar más de un año por la platica de los voticos… el jefe de campaña intenta cobrar 1 millón de pesos más de lo pactado, y luego de la entrada de $5.400.000 que habían dado por los 1.573 votos, se enciende la hoguera electoral y se activa el descaro cannabico cuando este tipo salió a cobrar de más. Ni tuvo en cuenta que se pagó contador a $1.800.000 por su negligencia, y perder $1.200.000. Sumado a esto, el ex -jefe de campaña, atacó por la espalda al excandidato en escenario público (en el puente de la Aburrida) y se pierde 1 año y medio en la fiscalía local 76 del circuito penal. Al final se tuvo que retractar, pedir perdón, excusarse en redes sociales y firmar un papel donde dice “el Señor FSM, se disculpa al señor Lukas Pasos Abadía, quien nunca amenazo de muerte a mi persona ni mi familia. Igualmente pido disculpas por las lesiones causadas el 26 de febrero del 2015”. (Ver FGN-50000-F-26. Código Único de Investigación 110016000013201502679). Según fuente fidedigna, al tipo nunca se le cobró las 700 lukas que negocio en dos cuotas de 350 ante el fiscal para supuestamente reparar daños.

A propósito de esto y dedicado Erramir. Se recibieron $8.000.000 por voticos (c/u a $4.246)…el partido te saca 20% y el CNE el 2%, así que réstele mi abogado gomelo 22%, quedan $5.400.000 maso…al tipo anteriormente citado se le pago medio palo y se cubrió una deuda con el contador de la campaña de $1.800.000. A mi hermano diseñador se le rodaron 400, al socio Alí 350, y a Guio mi hermano que hizo un video en yuotube de gratin le iba a pasar 200 lukas y sabe que dijo?...”Nada páseselas a la socia XXX para que ajuste la matricula”…eso si es ser cannabico. Aprenda mi abogadito de la del Rosario, Erramir querido, aprende a sumar y a pararte duro. Por eso los gomelos la cagan a la salida o a la entrada. Desconfía de un Activista Cannabico, máxime si es gomelo de la Javeriana, de los Andes o la del Rosario. Mínimo ni voto por el 72 Verde.

Siguiendo el mambo del fracaso cannabico, las cosas no podían ir peor, Juan Manuel Galán impulsa la ley Galán avalado por la reforma al artículo 49 de la constitución, que derivo del mico acto legislativo 002 del 2009 que Álvaro Uribe Vélez metió. De la ley 1566 donde el consumidor de SPA es considerado Drogadicto enfermo y debe ser sistematizado y atendido como tal, más de una corporación, fundación y red social vive de ofrecer pañitos de agua tibia en locomotora recalentada, intercambiar jeringas por jeringas, y vender humo (y muebles) a los renovadores de mafias.

A la vez, la jugadita Galán, evidencia como Uribe Vélez es quien (consciente o inconscientemente….vaya uno a saber si tiene consciencia), da luz verde para montar la renovación de mafias cannábicas más grande del continente y porque no, del mundo. Alejandro Gaviria, el ministro de salud más longevo de la administaición Santos, hace los goles cannábicos del año. Ayudado por sus delanteros William Wilches y Andrés López, generan y preparan todo lo de cannabis legal MADE in Colombia PAISITA HOMEEE. Esto derivo en legalizaciones del Cannabis terapeútica MADE IN USA, sin pedagogía preventiva y a favor de Pharmacielo y Mandalapharma, Canadienses e israelitas que sí saben pa que esta la yerba en este mundo del Oro Verde. Si al BARETO no Alvarito. Se debe recordar que López y Wilches luego de su paso como asesores Estatales en el diseño de Política Nacional de Drogas y la Cannabis Legal; hoy trabajan asesorando empresas y estados tipo Clever Leaves y Chile. Esos gomelos si saben pa que pagan semestres de 10 palos carajo.

A los anteriores pillos se suman entonces activistas comerciales, algunos desertores de las filas radicales, quienes se acomodan a las expos parafernalias, fatuas y neomafiosas. Giras, Rutas y lobbys latinoamericanos y europeos; hacer un negocio donde la 613 la 617 y sus decretos exigen al ICA, super breeders y al campesino del Cauca pararse más duro que los abogados gomelos de la del Rosario. Actualmente todo che chupo… New Colombian Research del amiguis de Galán compró la marca de un tal Guzmán, Pharmacielo es Pharmaenrredos y Pharrmaengaños y los Israelitas de Mandalapharma comen en el Valle del Cauca bien callados. El indio y campesino luego de ser endiosado, está lleno de LED y sin una semillita en el mercado. El diablo es puerco. El indio sale en fotos pero el bulto de billete lo ve pasar de frente. Hace 500 años trajeron espejos y se robaron el oro. Hace 5 años trajeron lámparas LED y se robaron la semilla. La historia se repite. De facto me asombró el ver caminando en Toribio Cauca a Marc Emery, solito dando el pago ¿Cómo ha cambiado el campo Colombiano compañeros? Y lo  peor es que mis activistas de Popayán no han entrado al Cannabis Paradise, y el frente 52 y 53 amenazan y hostigan al que no es…

En medio del mierdero y la convulsión se genera un espacio de regocijo y luz. Mediante una gestión estratégica con Si a la Dosis, se logra seducir a un congresista para hacer dos eventos durante el año 2016 y 2017. Marihuana más allá de lo medicinal ha sido el evento magno donde campesino cultivadores de Cannabis o Marihuana y Coca, entran y le dicen al gobierno cuanto es una libra de marihuana por 3. Al unísono, los activistas cannábicos logran la primera audiencia pública televisada en el Congreso de la República. El 17 de mayo del 2017 se prendió adentro y todo[3]. Todo iba lindo, luego de la Asamblea Nacional Constituyente, no había mejor escenario para que se formalizara el Movimiento Cannabico Nacional. Pero todo se derrumbó, dentro de mí, dentro de ti, y hasta tu aliento ya, me sabe a...

En marzo del 2017, ciento cinco (105) personas activistas de barrio nos damos cita de forma autogestionada en la reserva ecológica Rio Claro (Manizales, Caldas) donde se generan 3 días de trabajo en mesas estratégicas y se nombra una junta coordinadora (denominada junta directiva), para que en 6 meses consolidáramos el documento formal de estatutos de la Asociación Movimiento Cannabico Colombiano. ¿Qué pacho pacho?, muchos aún nos lo preguntamos. De 105 luego se contaron 33, y de ser 13 personas en juntas hoy solo hay 4, y de la Asociación Movimiento Nacional Cannabico Colombiano, registrada en cámara de Comercio de Manizales, le nace un hijo bastardo el cual es cuestión de pleito pues ASOCANNAGOL es una ASOCANNAESTAFA.

Nunca se ha visto tanta rapiña y peladera de cobre en un colectivo humano como tal. Los recién llegados Marcela Fuquene y William Calderon, seudo activistas de norte de Santander, montan un drama, treta y novela que junto a Juan de Dios Mosquera (alias juanaco) y Nelson Puerta (Alias Boris) hacen y deshacen a la par que de-rumban todo el andamiaje. Al interior del colectivo cannabico nunca se cumplió con lo pactado en relatoría y constituyente. LOS ESTATUTOS SE DEBIAN REFINAR Y VOLVER A CONSOLIDAR Y REFRENDAR EN ASAMBLEA GENERAL DENTRO DEL CUARTO ENAC. Esto nunca paso…y fue el peor error. Igual se registró a nombre de pocos y a espadas de muchos,  la Asociación Movimiento Cannabico Colombiano en Cámara de Comercio de Manizales y he ahí el lío.

Al traste del anterior desplante rondado por eliminaciones de chat, abuso de confianzas y matoneos virtuales tipo novela cannábica capitulo XXV, nace ASOCANNACOL, cuyos representantes legales son los mismos que la anterior asociación (más la mamá de uno), retoma los estatutos generados en asamblea y gracias a un abogado recién aparecido Sebastian Trujillo (actualmente preso en cárcel por abuso a mujer) moldean ASOCANNACOL muy derivado de la Asociación Movimiento Social Cannabico Colombiano. Dios los hace y ellos se juntan directiva. ASOCANNACOL se promociona en la Ruta Pedagógica, una vuelta por el país de pocos y descaradamente los fachos cannábicos. Luego de usurpar, cooptar y apropiarse del trabajo de años que mediante ENACS (Encuentros Nacionales de Activistas Cannabicos) había engendrado al MCC, sacan su ASOCANNACOL y dejan mamando al resto de 95 personas. Diez personajes en junta directiva entre ellos hasta el mismo padre del activismo colombiano, hacen de las suyas y venden por partes el Movimiento Nacional Cannábico: Al diablo, al estado y al peor de los postores, a los CANNABASTARDOS.



De este fracaso es válido resaltar entonces que el límite de los Movimientos Sociales Cannábicos en Colombia está marcado por el egoísmo y el narcisismo cannabico que en término de activistas genera un ethos altamente particular y poco fiable a la hora de realizar un proceso de cambio desde la resistencia. Es claro que la clase social en la cual se origina o levanta el individuo, afecta e interviene de forma negativa el carisma social del líder ejemplar. En palabras de a pié, y sonara resentido y de clase, pero el ser gomelo o carranga resucitada, es decir; arrancado que ve el bosque de dólares en el cannabusiness; engendra un tipo real de activista cannabico, dependiente del Facebook, del .com, y últimamente relacionado con la Reducción del Daño del Asistencialismo tecnocrático Seudosocial,  lo cual consolida como líder de opinión, individuos inescrupulosos que lo único que logra hacer es reproducir estereotipos culturales para la aceptación de políticas como la legalización regulada del Cannabis. Cannabis que de repente pasa de ser vicio de esquina de barrio, a la planta sagrada de médicos, incluso Veterinarios.

Con o sin COVID del cannabis medicinal se vienen por la legalización del Cannabis recreativo en Colombia, o como dicen los vendedores de humo, Asistencialistas Tecnocráticos Reencauchados, por el Senador Gustavo Bolivar; Cannabis para uso adulto. Luego de los “Nuevos Paracelsos” descritos de manera sugerente por el antropólogo Andres Góngora, se vienen los MINEROS CANNABICOS, tras el Oro Verde, en una rebelión de las Ratas Cannabicas que Fernando Soto Aparicio nunca imaginó en sus letras. Vienen por la RECREATIVA…con la medicinal dejaron mamando al indio y campesino, con la recreativa dejaran mamando al marihuanero y al jibaro…Échele Cabeza… ¿Autocultivo contra el Narcotráfico?...pero venga le vendo una semillita de Banco de Semillas europeo o norteamericano...Si como no. esencialismo estratégico que moldea una nueva especie de comercializadores del placer cannabico.

Otro elemento que se constata es que ni el Estado, ni las FARC ni la Sociedad Civil, han poseído, poseen ni poseerán, capacidad de respuesta en materia de Drogas. La sociedad civil hizo lo suyo y las propuestas quedaron en la mesa y no se leyeron. Incumplieron a consumidores de SPA ilegales y campesinos e indígenas productores de cultivos de uso ilícito. De 3.500 propuestas, el Centro de Pensamiento de la Universidad Nacional de Bogotá y su Gurú Alejo Vargas, redujeron de la forma más mediocre, a 5 propuestas que en materia de Drogas se quedan cortas y dan el monopolio de la prevención a familias e iglesia, a la vez que no se articula de forma adecuada con la Reforma Rural Integral y expone a la muerte selectiva al campesino mediante medidas y programas como PEDET´S y PNIS. La muerte está garantizada y se perpetúa por paramilitares y los frentes neo mafiosos que vienen por la retoma de la línea abandonada por las FARC-EP. En Cuba negociaron la línea, cae el Chapu González y las FACR dejan todas las rutas del Cauca, Valle del Cauca y Nariño a merced de BACRIM, disidencias, paracos y Neo Mafiosos, es decir ÑEÑE-Mafiosos viejo… the real mafia, ya tú sabes quien dio la orden.

Si el Cannabis es un Business o no, eso lo sabrán los empresarios reales del Cannabis, de resto lo único que se avizora en el horizonte inmediato es que legal o ilegales se seguirá fumando, y que si el ego no se diluye al son de la ejecución de acciones reales, fundamentadas a favor del beneficio común, seguiremos condenados a las tendencias en fabook y los pajazos mentales de cannábicos narcisistas que rayan con el despotismo ilustrado y la inoperancia social. Las acciones colectivas no requieren permiso ni aprobación, y dependen de los hombres, mujeres y otrxs que las ejecutan, planean y articulan a una realidad de vida saludable y garante del bienestar colectivo.

Pensar un problema es peor que buscar una solución, el señalamiento discriminatorio es provocador la ignorancia, las plantas no son como las pintan y quienes se relacionan de buena manera con ellas tampoco. El fumar un porro o ser un líder social activista de lo cannabico no brinda garantías de éxito en la lucha, al contrario, abre las puertas a la legalización selectiva y regulada por el Estado, lo cual es darle las llaves del carro al padre borracho que no solo puede generar un accidente, luego en casa, violenta a la madre e hijos, quienes son libres de hacer y pensar lo que quieran siempre y cuando obedezcan al Padre.

El cannabiscentrismo político genera hipocresía cannábica, la cual renueva mafias, y queda pendiente con el cambio real, tangible, evidente y colectivo. No podemos vender ilusiones, promover el humo e intercambiar jeringas, cuando en Colombia nunca pego la aguja y se vivió un proceso de guerras de carteles, narcopresidencias, narcoguerrilas, narcoparacos, ollas y jibaros y campos fumigados, y por último, unos diálogos de paz que han quedado en el incumplimiento de lo pactado, por lo tanto, cualquier tipo de implementación está fuera de contexto. Las drogas, sus políticas y el derrotero de las mismas es la carta de navegación que la sociedad Colombiana ha perdido. Somos un país náufrago en el mar de las drogas, en parte, por el interés individual de ejercer el poder para beneficios económicos netamente propios.

Por último y dando paso a la realidad anteriormente descrita. Se abre el tercer ciclo de protesta Marihuanera en Colombia. Se ha declarado una junta transitoria de la Asociación Movimiento Cannábico Colombiano, la cual ha buscado resolver directamente las diferencias con los 4 patos. De este intento de resolución de conflictos que derivó en desconocimiento y usurpación parcial de la razón social y personería jurídica, se deriva un arbitraje ante terceros y esperemos que la tercera sea la vencida. Muchos cuestionan el Movimiento Cannábico por las anteriores razones y más. Alguien decía de manera aireada, “Nosotros esperábamos que ustedes hicieran algo”, a la vez, alguien me preguntaba hace poco “Parce y que beneficio tiene pertenecer a la Asociación Movimiento Cannabico Colombiano”…

Somos hijos de la mafia, y hasta que no se identifique que la prohibición es el origen de todos los males, no podremos superar el sufrimiento biosicosocial que genera la interferencia estatal y seudocultural que genera el aparato burocrático y los movimientos culturales fatuos que impiden la trasmisión adecuada de información interna, a partir de la experiencia de modificación o alternación de la conciencia mediante el uso de plantas (enseñantes, sabedoras o de poder), como quieras decirle… Hasta no redefinir estas sustancias tan particulares, diluir el ego mediante la desfragmentación del yo en un trance de triptaminas, y denunciar, develar y resistir el Cannabusiness de los cannabastardos y la New Mafia desde la organización comunitaria activa y autoreflexiva…Este movimiento, esta sociedad y esta humanidad estarán condenados al fracaso, y no es cuestión de fumarse un porro y meterse un tripi…es cuestión de geopolítica biopsicosocial de la dominación etnofarmacológica que durante milenios ha consolidado la inquisición farmacrática que hace del que señala el patrón del juego farmacológico.

You are wellcome my friend

Dela White
2020.